En 2014 comenzó nuestra historia junto al fascinante pueblo de Soportújar, conocido popularmente como el “pueblo embrujado” por su rica historia de magia, leyendas y misterios. Fue en ese mismo año cuando La Liebre de Marzo dio sus primeros pasos para transformar y revitalizar las tradiciones de este lugar único, que ya contaba con su Feria del Embrujo. Sin embargo, hasta entonces, las brujas y su simbología no habían sido representadas con toda la identidad y autenticidad que merecían.
Decidimos adentrarnos en las raíces de Soportújar, explorando sus leyendas y tradiciones para crear una identidad visual que diera vida y fuerza a las brujas de Soportújar. Este proyecto no solo rescató la esencia mística del pueblo, sino que también ofreció a sus habitantes y visitantes una representación fiel y llamativa de sus personajes mágicos.
Nuestra intervención ayudó a enriquecer eventos y festividades emblemáticas del municipio. Entre ellas, el aquelarre de agosto, donde las brujas toman las calles en un espectáculo de luces, sonidos y danzas; la mística Noche de las Brujas en noviembre, que sumerge al visitante en una atmósfera de misterio y fantasía; y el árbol de Navidad encantado, una representación original y única que adorna Soportújar en las fechas festivas. Además, los característicos “maios”, o fiestas florales, también adquirieron un nuevo enfoque, fusionando la naturaleza con el encanto de lo místico y sobrenatural.
Cada una de estas celebraciones se ha convertido en una experiencia única que no solo muestra la historia y cultura del pueblo, sino que invita al visitante a descubrir un Soportújar lleno de magia y autenticidad. En La Liebre de Marzo nos sentimos orgullosos de haber contribuido a dar forma a esta identidad encantadora, conectando a Soportújar con sus raíces y proyectándolas hacia el mundo.